La asamblea local de Cruz Roja en Ibi acumula cuarenta años de historia y el viernes 7 de julio celebró un acto en su sede para conmemorar esta importante efemérides y agradecer a presidentes, trabajadores y voluntarios su trabajo y dedicación todos estos años.
Al acto asistió el presidente provincial de Cruz Roja, Francisco Galvañ, los alcaldes de la comarca y muchas personas vinculadas con esta entidad social que, actualmente, cuenta con 1.538 socios, 60 empresas colaboradoras, 28 donantes económicos y 210 voluntarios, noventa de ellos de forma muy activa.
El presidente, Rafael Valls, hizo un repaso por la historia de la institución, que se ha plasmado en un libro escrito por Pepe Ramírez Mellado y diseñado por Adrián Serralta, y entregó los reconocimientos a los presidentes de que le han precedido en el cargo. El primero fue Cristóbal Gámez (1982 a 1990); después José Jaime Amorós (1990 a 2013) y José María Cantos (2013 a 2019).
Nuevas instalaciones
Tras cuarenta años ocupando la sede de la avenida Juan Carlos I, Cruz Roja tuvo que efectuar a mediados del pasado año una reforma integral dadas las deficiencias estructurales que se detectaron en el tejado.
Las obras han consistido en una completa reestructuración de la vieja sede, mejorando el aislamiento, incorporando placas solares, luces led, aseos adaptados y una red de alcantarillado de la que carecía, que han dado como resultado unas instalaciones más amplias, modernas y seguras. El coste de estos trabajos ha ascendido a 280.000 euros, sufragados con recursos propios de la entidad.
Ampliando servicios
Cruz Roja ha puesto en marcha recientemente una nueva actividad encaminada al colectivo LGTBI. Según explica la coordinadora de la institución Beatriz Moltó, el objetivo de este proyecto es realizar acciones dirigidas a profesores y población en general y ofrecer apoyo. Para impulsar este incipiente programa cuentan con tres voluntarios.
Otro de los servicios es el acompañamiento a personas mayores, iniciado en el mes de marzo. Indica Moltó que se trata “de una acción muy simple pero muy efectiva, porque el objetivo es hacer compañía durante unas horas a la semana”. Cuentan por ahora con cinco voluntarios y la ampliación del programa dependerá del número de voluntarios que participen. También es nueva la campaña informativa sobre la ola de calor, con pegada de carteles e información a las personas más vulnerables. Respecto al resto de acciones, la coordinadora destaca la utilidad de programas como el de ahorro energético.