El pleno aprobó el nuevo contrato programa del departamento de Servicios Sociales para los ejercicios 2025 al 2028, que deberá suscribir el alcalde con la consellera del área y que supondrá una línea de coordinación interadministrativa y financiera para mantener este servicio público.
A través de este contrato, que supone una aportación anual por parte de la Generalitat de algo más de un millón de euros, se financia la plantilla del área municipal que, según la edil Montse Agulló, consta de seis trabajadores sociales, dos psicológos, dos educadores sociales, un técnico en integración social, un agente de igualdad, un promotor de igualdad, un asesor jurídico y cuatro administrativos. Tal y como indicó la edil en el último pleno, actualmente solo faltan dos administrativos, el agente y el promotor de igualdad y el asesor jurídico.
Además, el contrato programa también incluye financiación para llevar a cabo los programas de major a casa y menjar a casa, y dependencia.
Aunque Agulló defendió este contrato, criticó que la Generalitat esté aplicando recortes en otros programas, como los dirigidos al colectivo LGTBI, que pasan de 6.000 a 3.000 euros.
La portavoz de PP le replicó indicando que la reducción se ha debido “a que no se han justificado las actividades de 2022 y 23 y no se han presentado en plazo las alegaciones”.
