El Ayuntamiento de Onil ha abierto un periodo de veinte días de consulta pública para que los vecinos aporten sus opiniones sobre el nuevo Plan General Estructural (PGE), el documento que marcará el desarrollo del municipio en las próximas décadas. El actual planeamiento, aprobado en el año 2000, ha quedado desfasado tras un cuarto de siglo en vigor frente a los cambios sociales, económicos y normativos que han transformado la localidad.
El nuevo plan deberá prestar especial atención a las zonas más envejecidas, como el Casco Antiguo o el barrio de Mariola, así como crear un catálogo de protecciones para preservar el patrimonio cultural, natural y paisajístico. También contempla corredores verdes que conecten el núcleo urbano con la sierra para fomentar la movilidad peatonal y ciclista.
En cuanto al suelo, el dictamen municipal de 2021 concluyó que Onil no necesita más residencial, pero sí nuevas áreas industriales y de servicios. El documento abre distintas alternativas: ampliación del polígono de La Marjal, habilitación de franjas junto a la CV-802, creación de una bolsa de suelo entre Castalla e Ibi o la reserva de terrenos entre la CV-80 y la CV-799. Será el nuevo PGE el que determine qué opción, o combinación, resulta más adecuada.
Tras esta consulta, el procedimiento continuará con la redacción de un borrador, su aprobación en pleno, la exposición pública y, finalmente, la aprobación provisional antes de remitirlo a la Generalitat Valenciana para su visto bueno definitivo.