Con el ecuador de la legislatura recién cumplido, es momento de hacer balance. ¿Cómo valora el alcalde estos dos primeros años al frente del gobierno local?
La situación actual no tiene nada que ver con la de hace dos años. No voy a extenderme mucho más en explicar cómo era la realidad de este municipio y de este ayuntamiento el primer día de gobierno: sin presupuesto, con 7 millones de deuda a proveedores que crecía por días, con un ejercicio sin contabilizar ni cerrar, con el 25% de trabajadores de baja laboral… en algunos departamentos clave, como Servicios Económicos o Recursos Humanos, el porcentaje de bajas era desolador. No podíamos ni comprar folios o bolis. Una situación dantesca.
Tuvimos que sufragar de nuestro bolsillo infinidad de servicios y suministros, como el combustible de los vehículos municipales o la banda de música en algunos actos de Navidad. Era muy difícil avanzar porque faltaban herramientas y, pese a esto, seguimos adelante.
A día de hoy tenemos todos los ejercicios contabilizados y cerrados y hay 9 trabajadores de baja en todo el Ayuntamiento. Cuando cogí el cargo había unos 60. Hemos pasado del 25% al 4% de incidencia.
Además, en cuanto a la plantilla, se han cubierto los puestos más importantes y seguimos con la estabilización y con los procesos selectivos para cubrir las plazas que necesitamos.
Por fin, los servicios públicos de este pueblo, como la limpieza viaria, la recogida de residuos y la limpieza de edificios e instalaciones públicas estarán dimensionados a las necesidades de este municipio.
Y, por supuesto, disponemos ya de un presupuesto aprobado, pese a todos los impedimentos que nos han puesto, lo que supone un antes y un después a la hora de trabajar y dar servicios. Lo normal hubiese sido encontrar el ayuntamiento, hace dos años, como está ahora, así que podemos decir que hemos llegado a la línea de salida y ahora empieza nuestra carrera.
Pero, pese a eso, el trabajo que ha realizado todo el equipo de gobierno y, por supuesto, los trabajadores de la casa, a los que agradezco su esfuerzo, ha sido ingente. Ahora hay que empezar a utilizar todas esas herramientas para que los resultados y las mejoras en los servicios lleguen a la ciudadanía, se noten en la calle.
Aquí también quiero dar las gracias a los ibenses y las ibenses por su comprensión y paciencia. Aunque algunas personas no han comprendido o no han querido comprender la situación, la gran mayoría sí lo ha hecho y desde estas líneas quiero darles las gracias nuevamente. Ahora hay que seguir trabajando para dar a la ciudadanía los servicios que se merecen.
¿Pese a las dificultades a las que se ha hecho frente y los retos para sacar adelante unos presupuestos; sin embargo, la crítica no arrecia y no acaban de generar confianza. ¿Cree que conseguirán revertir la situación?
A veces son curiosas las paradojas de la vida, como que aquellos que provocaron el problema puedan estar mejor vistos que aquellos que lo estamos arreglando. Pese a esto, debo decir que nosotros no estamos aquí para dedicarnos a nuestra imagen, sino para trabajar y dar soluciones para Ibi.
Podemos entender la crítica, ya que todo lo que se ha conseguido, pese a ser importantísimo y suponer un trabajo enorme, ha ido dirigido a recomponer el ayuntamiento y a reconstituir las condiciones de trabajo. Eso no llega fácilmente a la calle. Pese a eso, también hay personas que nunca nos mostrarán apoyo, por mucho que hagamos. Cuando entramos a gobernar, hasta lo más ordinario, como comprar folios o pagar las nóminas, eran verdaderas gestas. Hemos salvado muchos proyectos y actividades que parecían perdidas irremediablemente por las dificultades para obtener crédito para pagarlas, pero salieron adelante con actitud y trabajo.
A día de hoy empezamos a trabajar con una situación medianamente normal, que es lo que se encuentran todos los equipos de gobierno al inicio de legislatura.
Ahora, con un presupuesto aprobado y una plantilla de personal aceptablemente dotada, es cuando nuestra actividad debe tener más impacto en el día a día de los ibenses. Si tras esto, la ciuadanía valora más positivamente nuestra labor, sería estupendo, pero sigo pensando que nuestro objetivo es hacer lo mejor para Ibi, independientemente de las valoraciones, con los recursos y el personal con los que contamos, sean muchos o pocos. Desde mi grupo nunca hemos escatimado en trabajo ni en esfuerzo, aunque vinieran “mal dadas”.
¿Qué proyectos considera que han sido los más importantes que han logrado desbloquear en este tiempo?
Sin lugar a dudas, durante este periodo, lo esencial ha sido la contratación de personas para puestos clave en el Ayuntamiento, el cierre de los ejercicios económicos 2022, 2023 y 2024, la elaboración de unos presupuestos y el pago de la deuda millonaria del ayuntamiento, esencialmente generada por el PP en la legislatura anterior y la recuperación de la plantilla de la Policía. Con los pocos recursos con los que contábamos, la agenda de actividades y actos programados también ha constituido un verdadero reto.
Pero la falta de personal sigue siendo un gran escollo. ¿Qué pasa? ¿Por qué no se cubren todos los puestos que faltan?
Se han cubierto muchos puestos de trabajo, pero es que había mucho que cubrir. Ya he puesto como ejemplo el primer día de mandato, en el que bajé a Servicios Económicos y encontré un departamento totalmente vacío, con cero personas activas. A partir de ahí, imagínense si se ha crecido.
Desde que me vi obligado a asumir la concejalía de Recursos Humanos se han resuelto más de 520 expedientes, entre procesos de estabilización, pago de nóminas, llamamientos y acumulaciones de plazas y funciones. Las bajas laborales, como ya hemos explicado, han pasado del 25% al 4%. Se han cubierto definitivamente muchos puestos de trabajo mediante la estabilización, hemos recuperado la plantilla de la policía… el problema es que hacía falta tanto que, aunque se ha avanzado mucho, aún queda trabajo por hacer.
Por otro lado, están las leyes que limitan la contratación de personal, como la Ley de Estabilización Presupuestaria, la falta de presupuestos hasta ahora, que también nos limitaba, la burocracia y los biorritmos típicos de la administración.
El sistema no está preparado para recomponer todo un ayuntamiento porque nadie espera que un gobierno lleve a una administración local hasta ese punto, como sucedió en Ibi en la legislatura pasada.
Sin embargo, los problemas en la plantilla municipal están volviendo a cobrar protagonismo, hasta el punto de que sus socios de gobierno, Som Ibi, se han quejado de que sus áreas no tienen personal y advierten de que no podrán contratar servicios. En el fondo subyace un reproche al PSOE porque sus áreas están mejor dotadas de gente. Usted es el concejal de Recursos Humanos, ¿qué va a hacer al respecto?
Las áreas que gestiona el PSOE tienen las mismas carencias que las de Som Ibi.
Al final, cuando uno lee los informes donde Som Ibi expresa estas quejas, lo que dicen es que no son capaces de gestionar sus áreas con los recursos que tienen, que son los mismos con los que se contaba en legislaturas pasadas.
Está claro que a todos nos gustaría trabajar con las condiciones perfectas, ideales, pero esto, en la vida real, no suele pasar. Hay que trabajar con los recursos disponibles, sean muchos o pocos, y luchar por cumplir los objetivos.
En esos escritos, los concejales de Som Ibi dicen que “no se hacen responsables” de que las cosas salgan adelante en sus áreas. Deben entender que la responsabilidad va ligada al cargo, sí o sí.
Tampoco creo que tengan mucho que reprocharnos. Cada vez que las cosas se les han complicado o han tenido que afrontar una decisión complicada, han llamado a mi puerta y siempre les he ayudado.
Respecto a lo que vamos a hacer, la respuesta es fácil: seguir trabajando como hasta ahora. La situación ha mejorado mucho desde principios de legislatura y la tendencia continua. Los procesos selectivos siguen adelante. Cada vez contamos con más personal en todas las áreas.
¿Cómo valora la relación con su socio de gobierno?
Somos dos grupos diferentes, con criterios diferentes en algunas cuestiones, pero hasta ahora hemos podido llegar a acuerdos y consensos. Esto no es un matrimonio, no hace falta amor.
Al final hay que ser práctico, porque lo importante es que los proyectos salgan adelante y los ibenses vean mejorada su calidad de vida.
Hablemos de futuro. ¿Cuáles son los proyectos prioritarios que quiere ver finalizados antes de que acabe el mandato?
Después de la anterior legislatura, en la que el pueblo quedó prácticamente estancado, todo es prioritario. Sin embargo, entiendo que se me pregunta por los proyectos más sustanciosos y relevantes.
Aquí podemos priorizar las contratas de limpieza viaria, recogida de residuos y reciclaje y la limpieza de edificios públicos.
Ya está todo preparado para reactivar las obras de la Plaza de la Iglesia. Infraestructuras como el balneario se abrirán al público. Sigue adelante la ampliación del cementerio. También las nuevas instalaciones de atletismo en el polideportivo. Queremos poner en marcha el Molí de Paper. Tenemos un proyecto para renovar la canalización y el encauzamiento de las aguas pluviales, para evitar riadas e inundaciones en Ibi.
Los parques y plazas necesitan arreglos, reformas y más mobiliario urbano y columpios. Dotar a Ibi de más suelo industrial es una de nuestras mayores prioridades. Y el geriátrico es un proyecto que rescatamos “in extremis” cuando ya se daba por perdido y al que hemos dedicado todo el tiempo y todos los recursos de los que disponíamos. Ahora este proyecto pende de un hilo, pero lucharemos por él hasta el final, como ya hicimos.
El desarrollo del polígono NPI-5 siempre ha sido un tema prioritario para los socialistas, ¿será posible que comiencen las obras esta legislatura?
Estoy convencido. Como todos los ibenses saben, el tema del suelo industrial es una de nuestras prioridades. Por un lado, tenemos buenas noticias con respecto al sector I2, el polígono que hay tras la nave del antiguo Intermarché. Iberdrola ya ha resuelto los problemas de suministro eléctrico que afectaban a esta zona y, con esta solución, este sector ya está abierto a la circulación de vehículos y queda totalmente operativo.
Por otro lado, estamos trabajando en el polígono NP-I5, que, como todo el mundo sabe, viene coleando desde 2002. Este polígono ha sufrido retrasos, modificaciones de plan, una sectorización que lo acabó de retrasar todo y actualmente, el principal escollo reside en el cumplimiento de la normativa sobre inundabilidad, que se ha visto endurecido a lo largo de estos años a causa de las sucesivas DANAs.
Estamos en contacto directo con el Ministerio de Fomento y ya estamos cerca de dar luz verde a la construcción de este sector industrial en Ibi.
Vamos a estar muy atentos a la evolución de este expediente para que, después de 23 años, podamos desatascar de una vez este sector industrial.
¿Cómo afronta los dos años que le quedan?
Todo mi equipo los afronta con ilusión y ganas de trabajar. Si hemos podido resistir a estos dos primeros años, durísimos, trabajando en condiciones de total restricción, todo nos parece siempre mejor.
En estos dos años debemos desarrollar las principales inversiones que recogíamos en el programa electoral y que luego se consensuaron con nuestros socios de gobierno. Estamos convencidos de que esta etapa será más ilusionante y gratificante que la anterior, tanto para la ciudadanía como para nosotros.