El Futsal Ibi ha escrito una de las páginas más brillantes de su historia al lograr el ascenso a Segunda División B. El conjunto alicantino se impuso por 4-2 al CDFS Segorbe en un emocionante duelo disputado en el pabellón de Paterna, que quedará para siempre grabado en la memoria del club y su afición.
Desde el pitido inicial, el encuentro fue un auténtico pulso entre dos campeones de liga, cargado de intensidad, calidad y emoción. A los cuatro minutos, Devesa abrió el marcador para los ibenses con un disparo raso imparable. La reacción del equipo castellonense fue inmediata, y Jesús igualó el encuentro poco después, reflejando la enorme igualdad sobre el parqué.
Superado el ecuador de la primera parte, Rubén y Álvaro trenzaron una gran jugada que acabó con un disparo al poste. En el rechace, la mala fortuna se alió con los visitantes, y Sergio marcó en propia puerta, devolviendo la ventaja al conjunto azulón.
Pese a los contratiempos, los de Segorbe no se rindieron. Su portero fue expulsado tras una salida errónea, aunque el Ibi no logró aprovechar la superioridad numérica. Justo antes del descanso, Sergio enmendó su error con una excelente acción individual que culminó con el 2-2, dejando todo abierto para la segunda mitad.
Tras el descanso, el desgaste físico comenzó a pasar factura en ambos equipos, y el ritmo de juego se vio ligeramente mermado. La mala suerte volvió a golpear a los castellonenses con la lesión de su segundo guardameta, lo que obligó a recurrir al tercero. A diez minutos del final, estalló la euforia en el banquillo ibense: Mario firmó el 3-2, un tanto que valía medio ascenso.
El Segorbe apostó por el juego de cinco en busca del empate, pero una rápida contra dejó a Chato solo ante la portería vacía para sentenciar el partido con el 4-2 definitivo.
El sueño se hizo realidad. Tras una temporada de esfuerzo, sacrificio y compromiso, el Futsal Ibi pone el broche de oro a un año inolvidable, alcanzando el tan ansiado salto de categoría. La celebración fue total entre jugadores, cuerpo técnico y afición, y el logro fue dedicado especialmente a una figura legendaria del club: Carlos Requena, eterno referente para la parroquia azulona.
El Ayuntamiento de Ibi ofreció una recepción oficial al equipo el jueves 6 de junio en el salón de plenos, con la presencia de jugadores, cuerpo técnico y directivos del club, así como del alcalde, el concejal de Deportes y miembros de la Corporación Municipal.