El próximo domingo 27 de noviembre, en la calle San Jaume de Onil, se descubrirá una placa conmemorativa para celebrar el aniversario de la declaración de Patrimonio de la Humanidad las fallas por parte de la Unesco. Una jornada a la que se ha unido la asociación de pueblos que organizan fallas en la Comunidad Valenciana, y en la que se han previsto diversos actos en toda el territorio para dar mayor visibilidad al título conferido por el organismo internacional en 2016.
Según explica, José Luis Sanchís, presidente de la colla colivenca de la Falla San Jaume, «es la primera vez que Onil se suma a esta celebración.»
La placa, construida con azulejos, está elaborada por ceramistas de Biar bajo el diseño Esther Quilis. Esta pieza artesanal que será colocada en la calle San Jaume, habla de la historia de las fallas en Onil estructurada en tres grandes etapas. La primera de ellas se inicia en 1935 cuando un jovencísimo Eusebio Sempere realiza la primera creación fallera y se convierte en el precursor de la fiesta en Onil. La guerra civil paraliza las fallas durante varios años hasta que a mediados de los años 40 se vuelve a retomar esta fiesta en la localidad. El último de los periodos se inicia en 2005 cuando el Ayuntamiento de Onil, junto a vecinos del municipio, recupera la Falla de Sant Jaume hasta la actualidad.
Sanchís destaca que el diseño de Esther Quilis en la elaboración de la placa, «le da un toque orientado al arte escultórico de Eusebio Sempere.»
A la inauguración de la falla está prevista la asistencia del presidente de la Federación de Gremios de Artistas Falleros y Hogueras, Joaquín Rubio y representantes de la Junta Central Fallera de Valencia.
El descubrimiento de la placa conmemorativa se hará a las 11 horas del domingo 27 de noviembre y desde la colla de Sant Jaume se invita a todos a su inauguración.