La empresa Biosilva (Cazorla) finalmente se ha puesto en marcha para desarrollar el estudio preliminar para la limpieza de las zonas afectadas de la sierra de Onil.
La firma cazorleña será la que va a acometer esta importante gestión forestal necesaria y urgente en parte del término municipal, tras la destrucción de una gran parte de la masa arbórea provocada por el temporal de enero de 2020.
Desde la concejalía de Medio Ambiente, gestionada por María José Sánchez, se ha explicado que desde el Ayuntamiento se ha intentado facilitar a los propietarios de terrenos forestales afectados toda la información y posibilidades para que puedan ejecutar en sus parcelas esta actuación medioambiental, por otra parte, obligada desde la conselleria competente.
Sánchez ha explicado a Escaparate que el objetivo de buscar a una empresa de biomasa que acometiera estas trabajos se debe, principalmente, a las dificultades que tienen los propietarios de pequeñas parcelas para acometer estos trabajos de limpieza. “Hemos contactado con dos posibles empresas para acometer estos trabajos, pero finalmente se decidió que Biosilva acometiera este primer estudio ya que podía acceder a las parcelas de más difícil acceso”.
En esta línea, la concejal de Medio Ambiente, ha subrayado que desde el consistorio se ha intentado que el coste económico para los vecinos afectados por estos trabajos sea 0, “por lo que la limpieza de las parcelas se compensaría con el resultado de la materia prima obtenida, para que posteriormente se pueda reutilizar como biocombustible”, concreta la edil.
Estas labores de intermediación realizadas desde el consistorio arrancaron hace algunos meses con una reunión con los propietarios de las parcelas donde se informaba de la obligación de los propietarios de la limpieza de sus fincas particulares, así como de las posibilidades de contratación con la empresa de gestión forestal.
Aprobación del estudio por parte de la Conselleria de Medio Ambiente
La complejidad de la tramitación y ejecución para desarrollar los trabajos de limpieza viene impuesta porque son los vecinos afectados los que tienen la decisión fina para contratar con la empresa forestal. En este sentido, una vez concluido el estudio previo, se propondrá una nueva reunión con los vecinos para dar a conocer los detalles de los trabajos a realizar en las parcelas y la aprobación individual de cada uno de ellos, y de esta forma, remitir toda la documentación a la conselleria.
María José Sánchez detalla que “todos los trabajos de limpieza forestal estarán supervisados por técnicos de la Conselleria de Medio Ambiente con el objetivo de asegurar que los trabajos sean correctos y no deterioren todavía más la masa forestal afectada”.
Si los plazos se cumplen, “probablemente en febrero podrían iniciarse la limpieza de la masa forestal”, matiza la edil.