Cerca de 2.000 kilos de residuo orgánico se han recogido durante los primeros tres días en los nuevos contenedores marrones que están instalados en la vía pública desde el pasado 22 de febrero. Desde la concejalía de Servicios Públicos se es prudente para dar una valoración ya estos datos son "solo el principio de una estrategia de reciclado que solo acaba de empeza"r.
El incremento de la basura orgánica en los contenedores supondrá una disminución de los residuos sólidos urbanos, tal y como ya demuestra de forma evidente los registros facilitados por la concejal del área, María Jesús Navas.
Según la información facilitada, y comparando la semana inmediatamente anterior al 22 de febrero, se ha pasado de 41.200 kilos a 38.860, lo que significa una leve, pero significativa reducción de basura urbana.
De forma paralela, la concejalía está llevando a cabo la captación de grandes productores de residuos orgánicos, para iniciar la recogida puerta a puerta, “aumentando así la cantidad de biorresiduo que podemos reutilizar y minorando su cantidad”, según explica la edil.
Por otro lado, la puesta en marcha de la recogida de papel y cartón de grandes productores, está siendo todo un éxito con 20 establecimientos ya adscritos en la primera quincena de funcionamiento. Navas aclara que “esto supone un menor uso de las islas de selectiva que han dejado de saturarse en algunas ubicaciones de Onil”.
Hay que indicar que dentro de los objetivos, lo que marca el Plan de Residuos de la Comunidad Valenciana, solo se alcanzará si separa en origen la materia orgánica “puesto que el 43% de nuestra bolsa de basura, que actualmente acaba en la fracción, es orgánica”, concluye la concejal. Observar el gráfico adjunto.