Las reiteradas quejas vecinales han sido el punto de inflexión para que desde la Alcaldía así como desde el cuerpo de la Policía Local se ponga en marcha una campaña para concienciar dirigida a los dueños de mascotas.
El objetivo de la iniciativa cívica de concienciación ciudadana se orienta hacia aquellos propietarios que no limpian los excrementos que depositan sus animales en la vía pública. Algo que ya está recogido en una ordenanza municipal pero que en algunas ocasiones, no se cumple.
Desde la Policía Local se explica que ante falta de civismo de algunos de sus dueños, «es conveniente proteger las necesidades vecinales de una convivencia limpia y justa para todos los ciudadanos del municipio.»
«La falta de conciencia por parte de algunos de sus propietarios en la necesidad del cumplimiento de la legislación en esta materia y el cuidado y protección de esos animales, así como el incremento en la recogida de animales sueltos por el casco urbano de la población, lleva a la necesidad de la elaboración de una nueva Campaña de Concienciación Ciudadana Animales de compañía».
La consecuencia de estos actos incívicos conlleva una falta de limpieza en los parques y espacios públicos.
Según informa la Jefatura de Policía de Onil, «la no recogida de excrementos caninos es un problema sanitario, pues se convierte en factor de riesgo para numerosas enfermedades y una fuente de gérmenes de todo tipo que pueden extenderse rápidamente y causar enfermedades, tanto a otros perros como a las personas».
«La circulación de animales domésticos por los espacios públicos de forma indebida también proporciona un peligro y un malestar para el resto de ciudadanos en cuanto, que un animal suelto no es controlable por su dueño y es una fuente de molestias para otras personas que se hallen cercanas.», explica.
Fases de la campaña
La campaña se inicia en diferentes fases a lo largo del mes de febrero, en las horas de mayor afluencia de paseo de animales domésticos y de mayor afectación.
En la primera fase se planificará con las concejalías, Policía, técnico medio ambiental y servicios de limpieza, estableciendo acciones a desarrollar, horarios y zonas de conflicto.
Una segunda fase orientada a informar a los propietarios de animales domésticos de la normativa, así como de las consecuencias negativas, de la comisión de las diferentes infracciones, y de las sanciones a imponer en caso de no cumplirlas.
La tercera fase de la campaña se centrará «en la acción directa de colaboración entre los participantes, procediendo a realizar un incremento de vigilancia específica para erradicar dichas conductas».
Según se explica desde el cuerpo de seguridad local, los agentes dedicarán al menos una hora en cada turno al control en la vía pública y con mayor incidencia en las zonas más conflictivas en materia de excrementos de animales, identificando a todos los propietarios de animales domésticos que circulen por la vía pública, «verificando la documentación personal del propietario, del propio animal, las condiciones en las que porta al mismo, y si ha cometido alguna infracción en relación a la legislación específica de animales domésticos, con la posibilidad de sanción en caso de incumplimiento.»