¿Cómo ha afectado la pandemia al tejido industrial de la comarca?
Está siendo una situación extraordinaria cuyo análisis será más acertado cuando tengamos una perspectiva global debido al paso del tiempo. Así y todo, haciendo una valoración, hoy podemos diferenciar dos periodos totalmente distintos de cómo ha afectado la pandemia.
El primer periodo, entre marzo y mayo, supuso la parálisis de todo el país y el cierre de fronteras, ocasionando problemas a la entrada de materias primas y la exportación de nuestros productos además de una ralentización del consumo.
En ese instante la incertidumbre se apoderó de muchos, pero una vez más las personas de nuestra comarca supieron adaptarse a las necesidades y volver a reinventarse. Recuerdo que en el periodo de 10 días de apertura exclusiva de actividades esenciales en nuestra comarca, muchas empresas estaban con actividad, unas produciendo para sus sectores pero otras se sumaron a la demanda de protección sanitaria que existía en ese momento.
El segundo periodo fue a partir de junio cuando entendimos qué estaba sucediendo y cúal era el alcance económico. En ese momento es cuando la importancia de la industria y de la diversidad empresarial de la comarca se puso en valor. Los diferentes sectores para los cuales se trabaja en las empresas ha hecho que el impacto económico que están sufriendo otros territorios no sea tan acuciado en nuestra zona. Hay sectores que no acaban de recuperar su actividad como es la automoción, el mueble, deporte, restauración, hotelero, pero hay otros que tienen más actividad que nunca, como alimentación, medioambiente, higiene, farmacia, sanitario...
¿Se puede extraer algún tipo de enseñanza de este periodo? ¿Algo que pueda mejorar al sector industrial?
Podemos aprender y mejorar siempre muchas cosas, tenemos que estar receptivos, analizando lo que ha pasado y dispuestos a mejorar.
Destacamos el análisis que debemos hacer de la dependencia que tiene cada empresa de sus proveedores. Estudiar si podemos diversificar esta cartera para evitar quedarnos sin producto ante un cierre de fronteras. El proveedor de proximidad es una gran alternativa a tener en cuenta.
También destacamos las posibilidades que tiene o no una empresa para adaptarse a nuevos mercados. En este caso, en el territorio ha sido posible y ha permitido sortear esta situación a algunas de ellas. Y, por último, poner en valor la solidez de la industria como motor económico a nivel nacional. Recuerdo que en un momento que no teníamos posibilidad de encontrar materiales de protección para el virus, fue la industria nacional quien se puso a fabricar esos materiales para toda la sociedad.
¿Cómo ve el futuro industrial?
El tejido empresarial e industrial de nuestra comarca goza de buena salud y la misma dependerá exclusivamente de que los empresarios y empresarias, así como de sus equipos, continúen creyendo en sus proyectos, haciendo inversiones, buscando nuevas oportunidades y mercados, aprovechando la riqueza industrial que les aporta nuestro territorio.
Somos conscientes de que atravesamos una situación muy extraordinaria, que antes nunca había sucedido, donde las “reglas del juego” van cambiando semana tras semana, es difícil planificar, donde la demanda va cambiando según la situación sanitaria, realizando nuevas inversiones de medidas de protección sanitarias. Ante todas estas y otras muchas novedades, las empresas de la comarca están afrontando el reto con gran esfuerzo, pero conscientes de ser capaces de superar, una vez más, esta situación y salir fortalecidos.
¿Qué pueden aportar las organizaciones empresariales en ese futuro?
Desde las organizaciones empresariales como IBIAE debemos estar con las empresas, conocer lo que necesitan e intentar darles soluciones.
Durante este periodo hemos estado trabajando como canalizadores de la gran cantidad de información que va apareciendo.
Asumimos el papel de interlocutor con la Administración para trasladarles las inquietudes y las necesidades de las empresas. Entendemos que las empresas y sus trabajadores son los que están a “pie de calle” soportando toda esta situación siendo quien más conocimiento de causa tienen sobre la realidad económica.
A su vez, desde IBIAE no dejamos de poner en valor la capacidad de reinvención, adaptación y fortaleza que el tejido empresarial de nuestra comarca ha demostrado durante la pandemia.