A raíz de la iniciativa de consultar a la ciudadanía sobre propuestas para trasladar al próximo presupuesto municipal, Som Ibi ha recibido muchos mensajes relacionados con la necesidad de contar con un espacio recreativo de ocio para los jóvenes.
Por ello, el grupo municipal ha planteado que se estudie la compra del edificio del antiguo cine Roxy y, “una opción que planteamos, dada la situación extraordinaria por la pandemia, es crear una partida como muestra de voluntad en la adquisición en un futuro menos incierto como en el que nos encontramos”, explica la portavoz Aitana Gandia.
Som Ibi opina que se podrían ir habilitando zonas de manera paulatina, para que no suponga una inversión de gran magnitud y su propuesta inicial es la creación de espacios de ocio para los más jóvenes, coexistiendo y complementándose con el Casal Jove, “que tan buenos resultados muestra desde su puesta en marcha”. Ello reforzaría la vida en el centro histórico “como un tipo de actividad totalmente complementada con la vida de vecinos y vecinas de la zona, ayudando a reactivar la economía en los comercios de la zona”.
Medidas sostenibles
Por otro lado, Som Ibi apuesta por medidas sostenibles en el mantenimiento de los edificios municipales, teniendo en cuenta la emergencia climática. Por eso, “consideramos oportuno ir adaptándonos, de manera gradual, hacia el futuro modelo que tendremos que implantar todos los municipios y una propuesta en este sentido es la adopción de medidas de sostenibilidad para los edificios municipales, como pueden ser placas fotovoltaicas y otro tipo de elementos, para dar inicio a un cambio que será de obligación tomar en muy poco tiempo”, concluye Gandia.
Otro muerto más para mantener. No tenemos bastante con el Molí de paper. Tenemos ya el Río, Casa de la cultura y Polivalente,sobra. Si el dueño no lo arregla, por algo será.