La Policía Local pudo detener la madrugada del domingo 11 de abril a un conductor que emprendió la huida, al percatarse de la presencia de los agentes.
El coche se encontraba a las 3:15 horas de la madrugada parado en la avenida de Azorín, cuando fue visto por la Policía mientras realizaba el servicio ordinario de vigilancia ciudadana.
Dado que estaba incumpliendo el toque de queda de las diez de la noche, la patrulla decidió aproximarse al vehí?culo para averiguar el motivo del quebrantamiento de dicho horario.
En el instante en que el conductor advirtió la presencia policial, emprendió la huida a toda velocidad, comenzando en ese momento una auténtica persecución por el casco urbano. El conductor intentó despistar a la patrulla circulando con gran temeridad por las calles, saltándose todas las señales de tráfico, invadiendo el sentido contrario de la calzada e, incluso, impactado con dos turismos que se hallaban estacionados en la calle Reyes Católicos, uno a cada lado de la calzada, los cuales resultaron considerablemente perjudicados como consecuencia del impacto.
Debido a estas colisiones, el vehículo fugado también quedó? muy dañado e imposibilitado para seguir circulando, momento en el cual los agentes pudieron interceptarlo a media altura de la avenida Miguel Herná?ndez.
El conductor, que circulaba con un acompañante, presentaba evidentes signos de embriaguez por lo que se le practicó la prueba de alcoholemia, arrojando un resultado de 0’81 mg/l por aire espirado (recordemos que el má?ximo legal establecido para poder conducir es de 0’25 mg/l).
El conductor, quien ya disponía de antecedentes penales por alcoholemia, fue detenido, trasladando los hechos a la autoridad judicial para su posterior valoración penal; siendo denunciado también administrativamente por incumplimiento de la limitación de movilidad nocturna a causa del covid-19.
50 años de prisión
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