La Estación Biológica-Jardín Botánico Torretes de Ibi cuenta con un nuevo reconocimiento por su compromiso en la conservación de especies y hábitats, ya que ha sido designada ‘reserva entomológica’ por la Asociación española de Entomología (AeE).
El acto de descubrimiento de la placa tuvo lugar el viernes 3 de junio y asistieron la vicerrectora de Transferencia,Innovación y Divulgación Científica de la Universidad de Alicante (UA), María Jesús Pastor; la concejal de Medio Ambiente del Ayuntamiento de Ibi, Pilar Herráiz; el presidente de la AeE, Eduardo Galante, y el director de la Estación Biológica Torretes-Jardín Botánico en Ibi, Segundo Ríos.
También participaron el director del Centro Iberoamericano de la Biodiversidad de la UA (CIBIO), José Luis Casas, y el vicepresidente de la AeA y profesor de la Universidad Complutense de Madrid, José María Hernández.
Este reconocimiento se declaró en 2019 pero, con motivo de la pandemia, el acto se pospuso.
En España, hasta el momento, solo han sido declaradas cinco reservas entomológicas impulsadas por la AeE para lograr un mayor grado de protección de áreas con especial riqueza entomológica o que alberguen especies singulares o amenazadas.
Además de esta designación y con motivo de que sobre las terrazas de antiguos cultivos se han asentado las colecciones botánicas, en el año 2012 fue reconocido como Jardín Etnobotánico por la Asociación Ibero Macaronésica de Jardines Botánicos (AIMJB). Además en 2010 se designaron 35,6 hectáreas como Reserva de Fauna de anfibios por la Conselleria de Agricultura, Medio Ambiente, Cambio Climático y Desarrollo Rural.
Especies y compromisos
En la Estación Biológica-Jardín Botánico Torretes y en sus inmediaciones se han registrado 257 especies de insectos pertenecientes a 11 órdenes diferentes, por lo que entre sus objetivos está continuar con los estudios, haciendo especial énfasis en los grupos de insectos de los que se tienen menos datos así como estudiar los polinizadores.
Así, han establecido refugios para insectos, como es el caso de los polinizadores, para promover su supervivencia invernal y favorecer los procesos ecológicos. Además, la restauración y potenciación de ‘charcas refugio’ es una prioridad para facilitar la colonización y dispersión de las especies con ciclos biológicos ligados al medio acuático. Un objetivo de gran importancia para este centro es llevar a cabo programas de educación ambiental con el fin de dar a conocer la importancia de los insectos en los ecosistemas y el actual deterioro de sus poblaciones.