El Grupo Municipal Socialista vuelto a solicitar que se replanten árboles en el casco urbano, tal y como lo ha venido haciendo desde la legislatura pasada, en la que registraron varias instancias advirtiendo del creciente número de alcorques vacíos en el municipio y solicitando al equipo de gobierno la replantación con especies de sombra adecuadas al entorno urbano, según explica el portavoz, Sergio Carrasco.
Ahora, añade el edil, “esta reivindicación ha cobrado fuerza tras los destrozos causados en el arbolado por el temporal Gloria del pasado mes de enero y son muchos los vecinos de Ibi que nos han pedido por medio de nuestra línea de Whatsapp la replantación en sus parques y barrios de árboles caídos tras el temporal”.
Según Carrasco, “la gente entiende la importancia de la vegetación y el arbolado en el casco urbano, su labor de dar sombra en verano, su capacidad de oxigenar el aire que respiramos y su influencia positiva en el estado de ánimo, por lo que ha reaccionado ante las últimas pérdidas” y advierte que “hace años que observamos la paulatina reducción del número de árboles en el casco urbano, lo que repercute negativamente en la calidad de vida de los ciudadanos, por lo que llevamos tiempo pidiendo una solución”.
El portavoz socialista explica que en Ibi existe una ordenanza que obliga a plantar tres árboles por cada uno eliminado, “pero no especifica dónde, por lo que las campañas del día del árbol, con plantaciones en el entorno natural, pese a ser positivas, permiten cumplir con la ordenanza sin resolver el problema que se genera en el entorno urbano”.
El PSOE pide que se lleve a cabo una replantación generalizada de árboles en todos los barrios, en la que participen los escolares, “porque ayudará a concienciar a las nuevas generaciones sobre la importancia de vivir en un entorno verde”.
Alcorques vacíos
Según explican los socialistas, actualmente hay unos 40 alcorques en las calles Castalla, Pau Casals y avenida Juan Carlos I sin árbol y, aunque entienden que puedan existir motivos justificados para ser arrancados, no comparten, sin embargo, que no se repongan después.
“Este hecho, unido a la eliminación de setos en espacios pú?blicos y el efecto destructivo que tienen los temporales en el arbolado, el resultado es un casco urbano cada vez má?s deforestado. Los á?rboles, además de decorar, regulan la temperatura y limpian el aire”, indican.