La rápida y audaz actuación de dos agentes de la Policía Local de Castalla fue clave para evitar un incendio de mayores proporciones que pudo haber arrasado con una vivienda unifamiliar .
La llamada del propietario de la casa alertando del siniestro al retén de la Policía fue fundamental para que la patrulla que en ese momento estaba de guardia, partiera a gran velocidad hacia el lugar del incendio, coordinando las tareas desde el retén por otro agente de servicio.
Tanto los dos policías como el propietario llegaron a la casa en el mismo momento y comprobaron que una de las hijas del dueño se encontraba fuera de la vivienda y sin lesiones.
La densa humareda que emanaba de la casa hizo muy complicada las labores de los dos agentes que, extintor en mano, iban entrando en el interior de la vivienda de forma coordinada y con un tiempo muy corto para evitar el peligro que suponía la inhalación de los gases tóxicos.
Esta primera actuación de la Policía fue fundamental para el incendio no se extendiera por toda la casa y produjera graves daños materiales o incluso la pérdida total de la vivienda.
Tras esta primera intervención, una dotación del parque de bomberos acabó de sofocar el fuego, que al parecer afectó a gran parte del inmueble.
Los propietarios de la vivienda han querido mostrar su agradecimiento a todos los que intervinieron en el siniestro, pero especialmente a los policías locales Iñaki Cantonet, Ricardo García, Juan Nieto y Ana Pérez por su “profesionalidad, coordinación y su arriesgada actuación que fue fundamental para salvar el resto de la casa.”
El fuego se inició en uno de los fogones de la cocina debido a un descuido.