Financiadas por la Conselleria de Educación, dentro del Plan Edificant, esta semana han comenzado las obras de construcción del nuevo edificio en el colegio Rico Sapena, tras su licitación a la empresa Diseño y Objetivos de Construcción S.L. el pasado mes de septiembre.
Las nuevas instalaciones dotarán al centro educativo de un nuevo gimnasio, vestuarios, un salón de actos y varios despachos, sobre una superficie total de 637,87 metros cuadrados y con una inversión de 786.821 euros.
El nuevo edificio se ubicará dentro de la parcela escolar, en una zona junto a las pistas deportivas, justo en el lugar donde en 2010 la Conselleria tuvo que derribar el antiguo edificio tras detectar graves daños estructurales.
El nuevo inmueble se proyecta como una gran sala polivalente de dimensiones 22,5 x 16,5 x 7,5 metros, que albergará el gimnasio y el salón de actos concebidas como dos salas de un mismo pabellón, compartimentadas por una divisoria plegable que permitirá su uso diferenciado o conjunto como un solo espacio. En el lateral Oeste del pabellón se instalarán los vestuarios, un espacio para el profesor, un aseo con ducha, un almacén y un cuarto de instalaciones. En el lateral Este, se incluirán dos despachos. Las obras tendrán una duración aproximada de siete meses.
Raquel Guill, responsable de Urbanismo, señala que este nuevo edificio “supondrá una importante mejora para el único colegio público de Infantil y Primaria con que cuenta el municipio y que con los años se ha ido quedando pequeño, consiguiendo así optimizar el servicio prestado a los alumnos y el desempeño de las funciones del profesorado y la dirección”.
Hay que recordar que la Conselleria aprobó la construcción de un nuevo colegio en Castalla valorado en 4,3 millones de euros y que se financiará con el plan Edificant.
El nuevo colegio se construirá en una parcela de 7.500 metros cuadrados de la partida de La Llauria, en las proximidades de la Ronda Foia, que circunvala el municipio. En este momento el proyecto se encuentra en fase de adjudicación.