Era cuestión de horas que se produjeran las cancelaciones de las fiestas patronales en otros municipios, tras hacerse pública la decisión en Ibi de trasladar sus fiestas de Moros y Cristianos a 2021. Y así ha sido. La reacción en cadena llegó con el comunicado del Ayuntamiento de Tibi a última hora de ayer anunciando la suspensión de las fiestas de la vaca en honor a su patrona Santa María Magdalena, que debían celebrarse del 20 al 25 de julio.
También Castalla anunciaba a última hora de ayer el traslado de los Moros y Cristianos al año que viene. Las fiestas castallenses, previstas para de 31 de agosto hasta el 5 de septiembre, se celebraran en 2021 manteniendo los cargos actuales de capitanes.