Una torrencial tormenta descargó a mediodía del sábado 16 de septiembre hasta 50 litros de agua por metro cuadrado en el interior de la provincia, dejando en esta comarca uno de los registros más elevados con 23’2 litros en poco más de media hora, según los datos de la red de observatorios de la Associació Valenciana de Meteorologia (Avamet).
Pese a la lluvia acumulada no se produjeron daños significativos, ni tampoco hubo que suspender ningún acto de las fiestas de Moros y Cristianos, que se estaban celebrando en Ibi. El principal inconveniente fue la circulación por el casco urbano y, sobre todo, por la avenida de la Provincia. También llovió con gran intensidad en Biar y Onil, donde el agua discurrió con fuerza por las calles en pendiente.
Año húmedo
Estas últimas precipitaciones se contabilizarán dentro del año hidrológico 2021-2022, que comenzó el 1 de octubre del año pasado y al que le faltan menos de diez días para concluir.
Según el último informe de la Agencia Estatal de Meteorología en la Comunitat Valenciana, el año hidrológico está teniendo un carácter húmedo en la Comunidad, con una precipitación media que es un 18% superior a la del promedio climático del periodo 1981-2010. Hasta el 19 de septiembre se habían acumulado 602’7 l/m2, cuando lo normal en el año hidrológico completo es de 509’5 l/m2. Por cuarto año consecutivo el año hidrológico resulta húmedo o muy húmedo en la Comunidad.
El superávit actual es debido a las abundantes y extraordinarias lluvias de la primavera, ya que el otoño de 2021 fue pluviométricamente normal, el invierno fue extremadamente seco y el verano seco. Casi tres cuartas partes de las precipitaciones acumuladas en el actual año hidrológico se registraron entre el 4 de marzo y el 4 de mayo y un 75% del territorio presenta superávit pluviométrico.
Verano muy caluroso
En cuanto al balance de este verano climático (trimestre junio-julio-agosto), el resultado es extremadamente cálido y seco, ya que la temperatura media ha sido de 25’3 ºC, lo que supone 2’3 grados más alta que la del promedio normal (23 ºC) y la precipitación acumulada ha sido 42’5 litros por metro cuadrado, que es un 45% inferior a la de la climatología de referencia (60’9 l/m²).
Lo más significativo, según el informe, ha sido la persistencia de las temperaturas anormalmente altas. De los 110 días transcurridos entre el 1 de junio y el 18 de septiembre, 103 han tenido una temperatura media superior al promedio normal.
El día más cálido de julio fue el 25. Ese día se llegaron a alcanzar en el aeropuerto de Alicante los 42’4 grados, siendo el valor más alto en este observatorio desde que hay registros (1967).
El día 13 de agosto fue el más cálido del verano en la Comunidad Valenciana. No solo se registraron temperaturas extraordinariamente altas, sobre todo en la provincia de Alicante, sino que también se produjeron tormentas secas y reventones cálidos y secos en puntos de las tres provincias. La temperatura máxima registrada ese día en el observatorio de Alicante, de 42 grados, es la máxima histórica registrada en la localidad en al menos los últimos 125 años.