Al menos, más de 3.000 personas residentes en la comarca tendrán derecho al Ingreso Mínimo Vital (IMV), aprobado por el Gobierno, y que garantizará de media, con variaciones según el tipo de hogar, unos 5.544 euros anuales por persona (unidad de consumo). Es decir, 462 euros al mes.
Los datos publicados por el Instituto Nacional de Estadística (INE) y que se refieren al año pasado son una aproximación sobre a qué población y el número de personas a quienes se dirige el ingreso mínimo vital, ya que seguramente estas cifras hayan aumentado debido a la crisis sanitaria del Covid-19.
Solo en Ibi, esta crisis ha dejado sin ingresos a 230 unidades familiares más de las que ya venían siendo atendidas por los Servicios Sociales del Ayuntamiento.
Por debajo de la media
Pese a todo ello, esta comarca está por debajo de la media de los umbrales de pobreza registrados a nivel autonómico y también nacional.
Los indicadores de pobreza, referidos a la ECV (Encuesta de Condiciones de Vida) del INE, sitúan a la comarca de l’Alcoià (a la que pertenecen Ibi, Castalla y Onil) por debajo de la media de la Comunidad Valenciana y de la provincia de Alicante. En referencia a la tasa de riesgo de pobreza, la ECV indica que en la Comunidad Valenciana en su conjunto, un 22,8% personas están por debajo del umbral de la pobreza, siendo este del 25,6% en la provincia de Alicante. En l’Alcoià, en cambio, se sitúa en el 19%.
Igualmente, el índice agregado AROPE (estrategia europea 2020) marca un 22,4% para esta comarca cuando la media de la Comunidad es del 27,6% y la provincia de un 30,9%.
L’Alcoià se sitúa también con el menor índice respecto al número de hogares con carencia material y hogares con carencia material severa, con un índice del 2% frente al 3,2 de la provincia y el 2,9 de la Comunidad.
Vivir con 5.000 euros al año
Vivir con 5.000 euros anuales en España supone estar todavía bajo el umbral de la pobreza.
En los países ricos, la pobreza se mide en relación a los ingresos del resto de la población. El indicador más utilizado es el de pobreza moderada, que considera que una persona está en riesgo de pobreza cuando sus ingresos son inferiores al 60% de la mediana.
En España, para un hogar compuesto de una sola persona el umbral de la pobreza moderada está fijado en los 8.871 anuales. Una de cada cinco personas en España (el 21,5%) se encuentra en esta situación, frente al 17,3% de Portugal o el 13,4% de Francia.
Pobreza ‘muy alta’
La nueva renta mínima alcanzará aproximadamente las 2,3 millones de personas, repartidas en 850.000 euros, y que consiga sacar a 1,6 millones de personas de la ‘pobreza muy alta’, la que vive con menos de 370 euros al mes por persona. De ellas, unas 400.000 son menores de edad, según cálculos del Gobierno. Por ejemplo, para un hogar con una persona, la renta garantizada es de 5.544 euros al año y para una familia de dos adultos y un niño, 8.861 euros anuales.
En caso de que el solicitante tenga otros ingresos, esta renta mínima modulará los ingresos, respetando los mínimos establecidos. Es decir, si una persona solo ingresa 200 euros en un mes, el Estado aportará 262 euros más para llegar a esos 462 euros mensuales.
Por municipios, tres localidades de Granada (Darro, Polopos y Albuñol) encabezan la estadística experimental de INE donde existe mayor población con ingresos inferiores a esta barrera media de los 5.000 euros al año o 416 euros al mes y entre los quince primeros puestos figuran dos municipios alicantinos, San Fulgencio (con el 24’1% de pobreza) y Tárbena (con el 24%). España es el sexto país de los 28 que conforman la Unión Europea con una mayor tasa de pobreza, con una de cada cinco personas en esta situación, el 21,5% del total, según los últimos datos disponibles de la Encuesta de Condiciones de Vida del INE de 2018.
La tasa de pobreza infantil de España es la segunda mayor de toda la UE, con un 26,8% de los menores de 18 años en riesgo de pobreza relativa. Solo nos adelanta Rumanía, con un 32%.