La psicosis se ha instalado en una parte de la población que vive en las zonas rurales alejadas del casco urbano de Castalla. Varios incidentes aislados han alertado a algunos vecinos que han tomado la decisión de solicitar por escrito al consistorio castallense, el aumento de más presencia policial en lugares alejados de la población.
Este es el caso de una mujer que relata a este periódico la experiencia vivida cuando se encontraba sola en el interior de su casa de campo y empezó a escuchar a dos de sus perros ladrar. Segundos después de oir los ladridos, un hombre de media edad y con aspecto desaliñado se encontraba justo en frente de la puerta de entrada de la casa, según confirma la propietaria, “con intención de abrirla e introducirse dentro. Al ver que yo me encontraba con un can de raza gran danés, la persona decidió darse la vuelta y marcharse andando hacia su vehículo que lo tenía encarado preparado para salir hacia la carretera”, no sin antes preguntar a la mujer si necesitaba personas para recoger la aceituna.
Este suceso inquietó a la vecina que lo puso en conocimiento a otro grupo de personas a través del whatsapp y tomó la decisión de desplazarse al Ayuntamiento de Castalla para solicitar más efectivos policiales a través de una petición formal con entrada de registro. Hasta el momento no ha habido respuesta por parte del consistorio.