El Valencia CF es una de las entidades referencia de las tierras valencianas y uno de los clubes deportivos más importantes de España. Un histórico de Primera División que, por diferentes circunstancias, en los últimos años ha caído de las primeras posiciones y de puestos europeos. Uno de los objetivos a corto plazo es volver a tener una plantilla competitiva que permita volver a luchar por los títulos.
Es por ese motivo que el presidente Anil Murthy le dio las riendas del conjunto che el pasado verano a José Bordalás, que firmó cinco muy buenas temporadas con el Getafe madrileño. Cuando queda menos de una vuelta, hay serias opciones de que terminen en posiciones de competiciones de Europa según las casas de apuestas deportivas. Para aquellos que quieran realizar sus pronósticos, se recomienda consultar los bonos sin depósito, aquellas apuestas que no requieren un desembolso, o las diferentes promociones que ofrecen.
El Valencia ha firmado hasta finales de enero una primera vuelta irregular, sin coger la senda de la victoria y con una plantilla que, en alguna ocasión, ha mostrado cierta descompensación y ha pecado de inexperta. Ahora, después del mercado invernal, se ha reforzado cada una de las líneas con el objetivo de ganar en talento y ambición. Salvo sorpresa mayúscula, el equipo debería ir mejorando el rendimiento en la competición regular.
Con una situación económica muy delicada, habitual en los últimos años en La Liga, los dirigentes del club apostaron por la política de fichajes a bajo coste y cesiones para reforzarse. El primero en llegar fue Eray Ervin Cömert. Se trata de un central joven, de 23 años, que defendía la camiseta del Basilea. Fichado por menos de un millón de euros, tiene experiencia en la élite, donde ya ha disputado competiciones europeas con su exequipo y ha sido internacional por su país, Suiza.
Más conocido para los aficionados al deporte español es Ilaix Moriba, uno de los culebrones de los últimos meses. El jugador guineano de 19 años, una de las mayores perlas de la cantera del FC Barcelona, se negó a renovar el pasado verano envuelto de polémica y salió dirección al RB Leipzig. Sin continuidad en Alemania, el centrocampista estará cedido en Mestalla hasta junio con la intención de reivindicarse y demostrar que salir del Camp Nou no fue un error.
Algo parecido sucedió con Bryan Gil, de 20 años. El andaluz, ex del Sevilla y una de las mayores promesas del fútbol nacional, fue traspasado al Tottenham Hotspur. Sin conseguir la regularidad en la prestigiosa Premier League, los ingleses han decidido cederlo hasta final de temporada al conjunto valenciano, pero cabe la posibilidad que amplie su contrato un curso más según el rendimiento.
Bordalás cuenta así con un refuerzo para cada una de las líneas: la defensa, la media y la delantera. En su defecto, le ha tocado despedirse de uno de los jugadores referencia de los últimos tres años, Daniel Wass, uno de los pocos mediocentros de los que disponía. El danés es uno de los últimos refuerzos del Atlético de Madrid por su experiencia y polivalencia. El acuerdo se cerró por 2,7 millones de euros.
Con estas tres incorporaciones de jóvenes, sumada a la salida de alguno de los veteranos, ha llevado al Valencia a ser la plantilla más joven de Primera División. Su edad media es de 24,7 años, con jóvenes como Yunus Musah (19 años), Koba Koindredi (20) o Giorgi Mamardashvili (21). Le siguen otros equipos en clara transición como el FC Barcelona, con 25,5 años de media; o la Real Sociedad, con 25,9.
Aunque Bordalás no ha ocultado su molestia por la no llegada de un mediocentro, se muestra satisfecho en términos generales con las tres incorporaciones del mercado de fichajes. También ha afirmado que estas no se hubieran producido de esta manera, en forma de cesión, si la situación económica de la entidad fuera mucho mejor. En el mes de junio se deberá volver a buscar nuevas figuras, veremos si como préstamo o traspasados.