El Ayuntamiento ha aprobado dividir en cuatro anualidades la inversión de algo más de 200.000 euros para restaurar el Molino de Papel.?El acuerdo se adoptó en el último pleno del 6 de noviembre, con la abstención del grupo socialista, cuya portavoz manifestó su desacuerdo con estos plazos. Según manifestó Susana Hidalgo, “cuatro años es mucho tiempo, debería haberse hecho en dos”.
También se mostró partidaria de reducir las anualidades la portavoz de EU, Noemí García, quien pidió que se hiciera “un esfuerzo para que las fases se reduzcan y, de este modo, también se eliminarían algunos de los costes” que conlleva la obra como la instalación de andamios que no habría que montar y desmontar. García también se mostró partidaría de acordar cuanto antes el uso que se le dará a este inmueblo “porque si supiéramos cuál es el proyecto que queremos, a lo mejor se podría replantear la plurianualidad”.
Sin embargo, la edil de Hacienda, Sara Díaz, aunque reconoció que “cuatro años puede que sea mucho tiempo”, recordó que la imposición del techo de gasto de la sostenibilidad financiera impide actuar de otra manera. Aún así, indicó que se podría adelantar la obra una vez se conozca la disponibilidad del remanente de tesorería y también si llegan subvenciones de otras administraciones.
Inversión para 2017
Para este año, el Ayuntamiento invertirá en la restauración del Molí de Paper 51.800 euros, 1.800 euros más de lo que inicialmente se había previsto. De momento, ha instalado una valla alrededor del edificio como medida de seguridad con el fin de impedir el acceso al interior, dado el mal estado en el que se encuentra y, en breve, se procederá a la adjudicación de la obra para el arreglo del tejado y la consolidación estructural del inmuble.
El Molino de Paper fue adquirido por el Ayuntamiento a finales de diciembre pasado a la familia Pérez Sirera, hasta entonces propietaria del histórico edificio. Ahora, queda por definir su uso futuro, sobre el que existen algunas propuestas por parte de los grupos políticos. ADIi se decanta por convertirlo en un centro de interpretación de Molí y del Barranc y un punto de información y entrada al parque natural de la Font Roja; el PSOE pide que se traslade allí el Museo de la Biodiversidad y Compromís propone crear una escuela de oficios.
Sóc optimista al respecte i veig que després de demnar la compra i la restauració està començant a ser una realitat. Els temps polítics són molt dilatats, però així i tot no deixe d'estar contenta.