Como todos los 28 de diciembre, Enfarinats i Oposició protagonizarán en la plaza de la Iglesia la famosa batalla de huevos, harina y cohetes borrachos, tras la toma del poder de los primeros.
Los actos han comenzado a primera hora de la mañana con el traspaso de la vara de mando por parte del alcalde, Rafael Serralta, al alcalde dels Enfarinats. Seguidamente, los estrafalarios personajes toman posesión, simbólicamente, de sus cargos en el salón de plenos, donde el alcalde dels Enfarinats da lectura de las normas que imponen durante la jornada, denominada Justicia Nova.
En la batalla, enfarinats i oposició emplearan unos 7.000 kilos de harina (que se lanza con extintores), 9.000 huevos y 7.000 cohetes borrachos, además de botes de humo de colores. Durante más de dos horas, este armamento es lanzado por los protagonistas en todas las direcciones, provocando escenas muy cómicas y divertidas.
Cuando finaliza la batalla, els enfarinats inician las inspecciones en los comercios de la localidad donde imponen sanciones simbólicas. El dinero recaudado se entrega al asilo San Joaquín.
A las cinco de la tarde, el alcalde dels enfarinat cederá el mando al rey dels casats, para que inicie las danzas en la calle, protagonizadas este año por ocho parejas de casados y nueve de solteros.