El exconcejal de Hacienda Miguel Ángel Agüera quedó la noche del lunes en libertad tras prestar declaración, durante dos horas y media, ante agentes de la Unidad de Delincuencia Económica y Fiscal (UDEF) de la Policía Nacional. Al exedil se le atribuyen presuntos delitos de malversación, negociaciones prohibidas a los funcionarios, blanqueo y cohecho.
La declaración se practicó en la Comisaría Provincial de la Policía Nacional, en Alicante, después de realizarse varios registros en el domicilio ibense, a cargo de una veintena de agentes de esta unidad especializada, desplazados desde Madrid. La Policía Nacional solicitó también al Ayuntamiento documentación sobre adjudicaciones realizadas desde el año 2005 hasta el actual y la Guardia Civil se personó a mediodía de ayer en las dependencias municipales para interesarse por la operación que se estaba desarrollando.
Según la Defensa de Agüera, en declaraciones a Escaparate, el interrogatorio consistió en preguntas relacionadas con su vida personal y política. Se le preguntó por sus bienes materiales, (vehículos, relojes, cuadros, viviendas y motos), por las relaciones con sus exparejas, (hijos y manutenciones) y por su solvencia económica y actividad política. En este sentido, una parte del interrogatorio se centró en las supuestas cuentas bancarias en Suiza.
En el registro efectuado en la vivienda del exconcejal en Ibi, los agentes se incautaron de varia documentación y un ordenador personal.
Está previsto que el miércoles 23 de mayo Miguel Ángel Agüera preste declaración en los juzgados de Ibi